Poblaciones Lejanas
Sus relieves candentes, sus pasajes, son un salmo
luctuoso y monocorde;
los niños corren y gritan,
como pequeños lapsos, en un eterno, enmudecido
sepia demente. Hay ciudades, también,
que dulcifican la luz del sol:
En sus espejos de oro crepuscular las aguas abren y encienden
cercos de aromas y caricias rituales; en sus baños:
las risas, las paredes reverdecientes
-Sus templos beben del mar.
Vagos lindes desiertos (Las caravanas, los vendavales, las
noches combas y despobladas, las tardes lentas,son arenas franqueables que las separan) mirajes, ecos que las enturbian,
que las empalman;
un gusto líquido a sal en las furtivas comisuras;
Y esta evocada resonancia.